Cuidar de los asuntos relacionados con el dinero de alguien más (así sea algo tan simple como pagar algunas facturas o algo tan formal como obtener un poder notarial financiero se conoce como cuidados financieros.
Es muy común que los cuidadores comiencen haciéndose cargo de asuntos personales simples, pero que terminen proporcionando cuidados financieros con el paso del tiempo. Dado que las necesidades pueden fluir y cambiar con rapidez conforme pasa el tiempo, es importante entender con anticipación las posibles labores legales y responsabilidades que tendrá. CaringInfo proporciona recursos para entender los cuidados financieros y cómo evitar dificultades. Aprenda cómo hacerse cargo de esta importante función al protegerse a usted y al paciente al mismo tiempo.
¿Qué son los cuidados financieros?
Los cuidados financieros no tienen una definición formal, son un término que se usa para describir la administración de las finanzas personales de una persona con una enfermedad grave, un adulto mayor u otro adulto que necesite ayuda, incluido pagar las cuentas, supervisar las cuentas bancarias, administrar los fideicomisos, presentar impuestos y asumir un poder notarial financiero.
Más del 90 % de los cuidadores actúan como cuidadores financieros, lo cual podría incluir contribuir con su propio dinero para cubrir costos, además de administrar el dinero del paciente. Dos años después del comienzo de los cuidados generales, más de la mitad de los pacientes necesitan ayuda completa para administrar sus finanzas (fuente: Merrill Lynch).
Con frecuencia, los cuidadores terminan haciéndose cargo de cada vez más responsabilidades relacionadas con el dinero, sin haber hablado antes sobre finanzas con la persona a la que le brindan cuidados y sin llevar un registro de lo que han gastado en su nombre.
Aunque tener este tipo de conversaciones puede ser difícil, es importante comenzar a hablar, documentar y planificar para esta eventualidad lo antes posible a fin de evitar problemas futuros.
Esto es especialmente importante si la persona a la que cuida sufre de demencia o podría dejar de considerarse competente para tomar decisiones en un futuro cercano. El paciente necesitará firmar documentos legales vinculantes mientras todavía esté facultado para hacerlo.
Aunque planificar puede ser abrumador, hay muchas herramientas disponibles para ayudarle con la función de cuidador financiero.
Comenzaremos respondiendo algunas preguntas comunes e importantes sobre los cuidados financieros.
¿Cómo comienzo a administrar las finanzas de alguien más?
Hable sobre finanzas con la persona a la que cuida. Intente obtener un panorama completo de su situación financiera, incluidas las posibles áreas de estrés y preocupación. Esto puede ser difícil, en particular entre padres e hijos.
Sea sensible a la necesidad de independencia de las personas. Consulte a la persona a la que está ayudando. Pregúntele cómo le puede ayudar. Ofrezca comenzar con pequeñas tareas, como pagar las cuentas. Pídale permiso para asumir responsabilidades, si corresponde. Respete sus deseos lo más que pueda al tomar decisiones y acciones.
Si corresponde, obtenga comentarios de otras personas. Si hay otros familiares que quieren o necesitan estar involucrados, es mejor incluirlos lo antes posible para evitar malentendidos. Si la familia no puede ponerse de acuerdo, en algunos estados hay coordinadores con capacitación especial para el cuidado de los adultos mayores que pueden actuar como mediadores.
Haga una lista de todos los gastos y las deudas, incluidos los servicios, hipotecas o pagos de la renta, pagos de automóviles, seguros, impuestos inmobiliarios y más.
Documente todos los ingresos, incluidos los beneficios de seguridad social, las pensiones, distribuciones de jubilación, beneficios para sobrevivientes, regalías y otros ingresos, así sean regulares o esporádicos.
Cree un presupuesto. Un presupuesto escrito debe incluir todos los ingresos y gastos, incluidos los fijos y los irregulares. Haga un plan para pagar los gastos fijos (como los servicios, la hipoteca o los pagos de la renta, el seguro, etc.), además de la comida, el transporte, algunos cálculos de costos médicos de bolsillo y recreación. Un calendario, ya sea de papel o electrónico, puede ser útil para conservar un registro de las fechas límite de los pagos.
Haga un inventario de las cuentas, pólizas de seguro, tarjetas de crédito, identificaciones de usuario y contraseñas de sitios web. Guarde el inventario en algún lugar seguro. Una hoja de cálculo protegida con contraseña o una hoja de papel en un lugar seguro pueden funcionar. Hay soluciones de contraseñas electrónicas comerciales disponibles por una tarifa, como LastPass y 1Password.
Obtenga acceso a las cuentas. Esto puede ser tan simple como agregar su nombre como titular adjunto de la cuenta u obtener una autorización verbal del titular de la cuenta principal para hablar en su nombre. Podría sentirse tentado a usar las credenciales de inicio de sesión del titular para actuar en su nombre; sin embargo, esto no se recomienda porque podría llegar a un punto en el que el titular de la cuenta no pueda confirmar que le otorgó su permiso para usar sus credenciales.
Obtenga una autorización para hablar en nombre del paciente. La forma más fácil de tomar decisiones de manera oficial en nombre de alguien más es ejecutar un poder notarial de larga duración, que es un documento legal que designa a alguien para actuar en nombre del paciente. Por lo general, estos formularios están disponibles en Internet tanto gratuitos como por una cuota nominal. Para que sean válidos, es necesario que cuente con testigos o que se notaricen. Saque copias en papel y electrónicas del documento del poder notarial, ya que muchas organizaciones podrían necesitar una copia antes de permitirle hablar sobre las finanzas del paciente.
Simplifique y automatice procesos. Configure pagos automáticos para las facturas regulares. Cierre todas las cuentas de tarjetas de crédito que pueda, con excepción de las más necesarias. Consolide los activos si corresponde.
Si corresponde, limite los riesgos. Si la persona a la que cuida padece de problemas cognitivos, puede tener sentido conseguirle na tarjeta de débito recargable que usted administre, una tarjeta de crédito con un límite bajo o una tarjeta de cajero automático para una cuenta de banco pequeña. Esto les permite independizarse, pero limita los riesgos. Las aplicaciones comerciales disponibles, como Carefull y EverSafe ofrecen un monitoreo remoto de las transacciones financieras. Estas alertan a las personas autorizadas sobre las cuentas pendientes por pagar y la actividad inusual, por ejemplo.
Mantenga un registro del dinero que gasta y cualquier gasto de su bolsillo que haga en nombre del paciente. El primer dato será útil si los demás tienen preguntas y el segundo será útil para presentar sus propios impuestos.
No se olvide de los impuestos. Los impuestos sobre la renta deben presentarse, los impuestos inmobiliarios deben pagarse y se deben hacer las distribuciones mínimas requeridas (Required Minimum Distributions, RMD) de las cuentas de retiro, incluso en caso de una enfermedad y discapacidad grave. Ser proactivos es muy importante y evitará sanciones y complicaciones.
Aunque la lista para empezar a brindar los cuidados financieros puede parecer abrumadora al inicio, mientras más pronto comience, mejor. Si la persona a la que cuida todavía es competente, es posible que no tenga que empezar con todo al mismo tiempo. Sin embargo, es buena idea revisar esta lista con regularidad. Como cuidador financiero, quiere asegurarse de que no crezca la información nueva, las cuentas o la deuda desde que implementó un plan.
¿Cuáles son los prerrequisitos legales para ser un cuidador financiero?
Estrictamente hablando, los cuidados financieros no necesitan autorizarse mediante documentos oficiales. Muchas personas cuidan los intereses financieros de alguien más sin ningún documento legal.
Sin embargo, es muy útil contar con documentos como un poder notarial financiero antes de que la persona que recibe cuidados sea cada vez menos capaz de tomar decisiones por sí misma.
Muchas instituciones no hablan con alguien que no sea el titular de la cuenta sin la documentación por escrito. Si no se ejecuta ningún poder notarial antes de que la persona sea incapaz de hablar por sí misma, ya sea por su enfermedad o por demencia, el cuidador tendrá que pedir una autorización a los tribunales, como mediante un poder notarial.
¿Qué es un poder notarial de larga duración?
Hay dos tipos de poderes notariales de larga duración.
Un poder notarial financiero de larga duración es un documento que especifica quién está autorizado para administrar sus asuntos financieros en caso de que quede incapacitado. Esa persona se conoce como agente.
Por otra parte, un poder notarial de atención médica de larga duración (que con frecuencia forma parte de las instrucciones anticipadas), designa a alguien (es decir, a un agente) para que tome decisiones médicas en su nombre en caso de que quede incapacitado.
Visite nuestra página de poderes notariales para aprender más.
¿Qué obligaciones o responsabilidades tienen los cuidadores financieros?
Cualquiera que acepte las responsabilidades de un cuidador debe estar consciente de la serie de responsabilidades y labores legales que incluye esta función.
Separe sus finanzas
El agente en un poder notarial financiero tiene la responsabilidad legal y ética de actuar con una capacidad fiduciaria, lo que significa que debe actuar en el mejor interés de su cliente o paciente, así como evitar cualquier conflicto de interés.
Una diferencia más notoria entre una relación legal informal y formal es que un poder notarial financiero también separa sus finanzas personales de las acciones que toma en nombre del paciente al que cuida.
Por ejemplo, como el agente de alguien, puede asumir compromisos financieros en su nombre y esa persona sería responsable de pagar esos costos con su dinero. Usted no tendría la necesidad de pagarlos personalmente.
Si no tiene documentos legales que separen sus finanzas de las del paciente, tenga cuidado al firmar cualquier contrato o acuerdo de tratamiento o servicios en nombre de alguien más.
Si firma documentación que le solicita ser la parte “responsable” (garante o cofirmante), AARP explica que usted podría ser responsable personalmente de esos gastos. Siempre lea todo antes de firmar y pídale a alguien que le explique los documentos que no entienda. No quiere que le sorprendan con una gran factura con su nombre tras unos meses en el camino.
Cómo proporcionar cuidados estándares
Si usted está a cargo de las finanzas de un adulto mayor, deberá usar ese dinero de manera adecuada y adquirir los servicios necesarios para el beneficio del paciente. Así como debe proporcionar un entorno limpio y seguro con comidas nutritivas, ropa de cama limpia y ropa adecuada al desempeñarse como cuidador, no adquirir los servicios (fuente: Dr. Robert Stall’s Caregiver’s Handbook [Manual para cuidadores del Dr. Robert Stall]) es una forma de abuso o negligencia.
Todos los estados han aprobado leyes contra el abuso de los adultos mayores, aunque las disposiciones específicas varían. Los cuidadores tienen dos obligaciones de conformidad con estas leyes: no abusar del adulto mayor (de forma física, mental o monetaria) e informar cualquier incidente de abuso o sospecha de abuso. Comuníquese con los servicios de salud mental de su condado para recibir orientación.
Consulte estos recursos adicionales sobre los cuidados financieros en fuentes confiables:
- Guides for Managing Someone Else’s Money (Guías para administrar el dinero de alguien más) de The Consumer Financial Protection Bureau (CFPB)
- What Caregivers Should Know About Managing a Loved One’s Money (Lo que los cuidadores deberían saber sobre administrar el dinero de un ser querido) de AARP
Después, aprenda sobre cómo lidiar con una deuda médica como cuidador.